La Mancomunidad de Residuos de la Ribera Alta entregó ayer en Azagra los premios de la Restocopa, celebrada del 2 de mayo al 2 de julio de 2022
La Mancomunidad de Residuos entregó este miércoles en Casa de Cultura de Azagra, los premios de su Restocopa. Al acto, acudieron la presidenta de la Mancomunidad, Belén Cerdán, el gerente del Consorcio de Residuos, Fernando Mendoza y alcaldes y concejales de las localidades que pertenecen a la entidad.
La Restocopa ha sido una competición, organizada por el Consorcio de Residuos en colaboración con varias entidades como la Mancomunidad de Residuos Sólidos Urbanos Ribera Alta de Navarra. Su objetivo era conseguir la REDUCCIÓN DE LA FRACCIÓN RESTO, es decir, aquella fracción de los residuos domiciliarios que se recoge en el contenedor de tapa verde, y que acaba en buena medida en vertedero.
La localidad ganadora ha sido Azagra cuyos vecinos y vecinas han conseguido reducir algo más de un 5% (respecto a los mismos meses del año anterior), la aportación de residuos al contenedor de fracción resto. En segunda posición ha quedado Falces, ganadora de 2021, con un 4,51% y en tercer lugar Funes con un 4,04%.
La Mancomunidad ha repartido un total de 10.500 € en premios, traducidos en mobiliario urbano fabricado con plásticos NO RECICLABLES o de rechazo cuyo destino sería el vertedero y que se aprovechan en la fabricación de estos objetos.
Todos los pueblos pertenecientes a la Mancomunidad han obtenido su premio ya que en todos los casos se ha conseguido reducir la fracción resto. El reparto del importe de los premios se ha realizado de forma proporcional al porcentaje de bajada del aporte de cada municipio.
En su intervención el alcalde de Azagra, Rubén Medrano, agradeció a los vecinos su esfuerzo y se mostró muy satisfecho con este premio que convertirán en papeleras, bancos y jardineras para Azagra.
El gerente de Nilsa, Fernando Mendoza, hizo hincapié en «la importancia de la economía circular que debe sustituir en nuestros hábitos a la economía lineal, presente en los últimos años». Se mostró optimista con el futuro aunque indicó que había que seguir trabajando.
El gerente de la Mancomunidad, Miguel Ángel Arrastio, tras presentar los datos de la recogida, habló de los retos de futuro «algunos de ellos, indicó, estamos muy lejos de que puedan ser cumplidos». Arrastio afirmó la importancia de «reducir las toneladas depositadas en el contenedor de fracción resto por lo que esto supone de coste económico y medioambiental».
La presidenta, Belén Cerdán, por su parte, felicitó «a todos los ayuntamientos por recoger menos fracción resto» e indicó que » los datos evolucionan de forma positiva, pero de una manera muy lenta. Para el año 2023, como consecuencia de la nueva Ley de Residuos de España, el canon de vertido subirá de 20 € la tonelada de residuos que acaba en el vertedero, a 30 euros cada tonelada, lo que supondrá un aumento significativo en nuestros presupuestos que deberemos asumir. Si a ello le sumamos que hay fechas y objetivos claros en materia de reciclaje y reducción de residuos a vertedero, no podemos relajarnos por muy positivos que puedan parecer los datos.»
Para ello, la Presidenta pidió un pequeño esfuerzo colectivo «debemos seguir haciendo campañas de concienciación, pero debemos dar pasos hacia adelante, debemos servir de ejemplo y que nuestros gestos, por pequeños que nos puedan parecer, los hagamos extensivos en nuestros círculos de amistad y familiares e inculcar la necesidad de reciclar. El boca a boca, la transmisión oral, es imprescindible para lograr los objetivos que tenemos marcados, objetivos que no debemos caer en la suficiencia de pensar que son un capricho, sino que debemos entender que surgen de la necesidad de actuar, de la necesidad de reducir los gases de efecto invernadero y de la necesidad de no seguir dañando el mundo en que vivimos y que vamos a dejar a nuestras generaciones posteriores.»
Por último, Cerdán manifestó que «por nuestra parte, desde la Mancomunidad seguiremos trabajando duro para conseguir que nuestra recogida de residuos sea eficiente y eficaz y permita el aprovechamiento de la mayor parte posible de lo que tiramos a la basura. Contamos con los medios necesarios; una flota de camiones de recogida en perfecto funcionamiento, personal cualificado y comprometido, una planta de tratamiento de envases que sigue creciendo y siendo ejemplo de trabajo bien hecho, lo tenemos todo. Pero a pesar de ello, seguimos necesitando del compromiso ciudadano y es ahí donde debemos incidir y dedicar nuestros esfuerzos.»